Bienvenida lluvia
Maribel Egido Carrasco
Después de tanto añorarla, la lluvia nos ha visitado en estos últimos días. Ya sé que no faltará quien diga que ha llegado en el momento más inoportuno, por aquello de la Semana Santa, pero siendo esto un contratiempo y una desilusión para mucha gente que dedica ilusión y esfuerzo a preparar los desfiles procesionales, es tanta la necesidad de la lluvia, que todos debemos alegrarnos de que llegue, aunque sea un poco a destiempo.
La primavera, que ya lleva entre nosotros algunos días, será mucho más espléndida tras esta lluviosa visita que debería ser larga y abundante para paliar la sequía que ha dejado campos y pantanos en una situación ya preocupante.
El gratísimo olor de la tierra mojada y el disfrute de contemplar los árboles y arbustos como recién lavados, debe compensarnos de quizá tener que renunciar a algún acto de Semana Santa.
En la foto podemos ver los arbolillos cercanos a la muralla, que elevan bajo la lluvia sus ramas con un delicioso color verde tierno, (por cierto que el hacer esas fotos, casi me cuesta coger con apuros el coche de línea).
La primavera, que ya lleva entre nosotros algunos días, será mucho más espléndida tras esta lluviosa visita que debería ser larga y abundante para paliar la sequía que ha dejado campos y pantanos en una situación ya preocupante.
El gratísimo olor de la tierra mojada y el disfrute de contemplar los árboles y arbustos como recién lavados, debe compensarnos de quizá tener que renunciar a algún acto de Semana Santa.
En la foto podemos ver los arbolillos cercanos a la muralla, que elevan bajo la lluvia sus ramas con un delicioso color verde tierno, (por cierto que el hacer esas fotos, casi me cuesta coger con apuros el coche de línea).